Religiosos por tradición:
Mirar lo que os digo: – La muerte de Cristo fue lo único que satisfizo la santidad de Dios. La muerte de Cristo fue lo que pagó el precio por ti y por mí de nuestros pecados.
Cuando Jesús vino había personas como vosotros que se llaman fariseos. Ellos como vosotros habían heredado la religión de sus tiempos “el judaísmo”. Como tú has heredado la religión de tus padres. Cuando Jesucristo viene les dijo: “YO SOY EL CAMINO”. ¿Sabéis lo que le dijeron los fariseos a Cristo?, ¿Cómo que tú eres el camino?, ¿Entonces en el camino que nos encontramos vamos a los infiernos?
Jesus les dijo: así es efectivamente, van derechos al infierno.
LO DIRE MAS ALTO PERO NO MAS CLARO: olvídate de toda religión, inscríbete en primeraresurreccion.com y acepta a Jesús como el salvador ,o vas derecho al infierno.
Porque inscribirse en la primera resurrección representa la salvación automática, sin Juicio Final, si juráis y guardáis el juramento, y esto que os digo ahora ES PALABRA DE DIOS.
El mundo todavía no ha comprendido que LAS RELIGIONES NO NOS SALVAN, ni los sacramentos, ni las liturgias, ni las ceremonias. NOS SALVA SOLO LA MUERTE DE JESUCRISTO.
Si las religiones pudieran salvar, si algún rito externo, nos pudiera salvar; no habría necesidad de que Jesucristo muriere en una cruz. Dios nos habría dicho: – Pertenezcan a una religión, pórtense bien, no fumen, tomen la ostia los domingos, vayan de peregrinación cuando haya que ir de peregrinación y NOS VEMOS EN EL CIELO.
Damas y caballeros, este no es el mensaje de la Biblia, la Biblia dice: – que es la muerte de Jesucristo lo que puede hacer que tú te presentes delante de Dios como una persona justificada.
Solo la muerte de Cristo, puedo salvarnos de nuestros pecados.
El mundo, todavía sigue creyendo que se necesita hacer algo para poder ganarse la salvación. El mundo, no soporta con su ORGULLO RELIGIOSO recibir algo gratis de dios. Y la Biblia dice: Siendo justificados gratuitamente, por su gracia mediante la redención que es en Cristo Jesús.
Tú no puedes ir al Señor y decirle, Señor te ofrezco mis buenas obras, mi peregrinación, tienes que ir a Dios con las MANOS VACIAS.
Mira lo que te digo: haz esto mañana mismo. Lo primero reconoce que eres un pecador, y lo segundo, que no pase un solo día más después de haber leído este mensaje en el que no comuniques a alguien la dirección de esta web.
Esta es la Palabra de Dios: “Si escuchaste de mí y mi Palabra y pasaste de largo sin predicar y difundir mi evangelio… ya sabes el resto.
DIOS CARGO EN ÉL, (EN SU HIJO JESUCRISTO), EL PECADO TUYO Y EL PECADO MIO. Entonces la salvación no puede ser del hombre, el hombre no puede hacer nada para salvarte ,más que crees y estirar la mano y decirle: SEÑOR RECIBO GRATIS SU SALVACION, CREO EN LA MUERTE DE CRISTO ,RECÍBEME ASÍ DE PECADOR.
TU ERES JUSTIFICADO POR LA FE, nunca por las obras. ¿Sabes por qué? , para que nadie se glorie.
Mira compañero DIOS nunca miente. Lo que se le ha dicho a Juan Carlos va a pasar.
Jesucristo vino al mundo no sólo por lo anterior, sino también para buscar lo que se había perdido.
No hagas el juego a ninguna religión, a nada, sólo a Jesucristo.
Si las religiones salvaran, la muerte de Cristo fue el desperdicio más grande que Dios pudo llevar a cabo.
Jesucristo es el único juez, el único camino hacia Dios.
“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí.”
Este texto no es mío, es de otro apostol de Jesús, de Pastor, no tengo ni idea de quien es, ni donde vive, pero me envía sus comentarios, y yo entiendo que Jesús está con él, como el entiende que Jesús está conmigo, y con todos los que le amamos y nos congregamos aquí, para leer su Palabra.
Ésta es la AUTÉNTICA COMUNIÓN CON JESÚS, congregándonos aquí, vivimos una oportunidad única, compartir con Jesús sus palabras para el Fin de los Tiempos, en esta web sagrada por haberla elegido el propio Jesús, para predicar Su Evangelio como a Él le gusta, sin manipulaciones ni cortes, ni intermediarios, salvo Juan carlos, José y Pastor. Pronto vendrán más, y aquí nos reuniremos con vosotros y con Él.