Si usted quiere de hecho salvarse de la muerte eterna, usted debe:
a) Creer y aceptar que Jesucristo es Dios y Hombre;
b) Creer y aceptar que Jesucristo, Hijo de Dios, vino a este mundo para ofrecerse a la Justicia del Padre a fin de pagar el Pecado de todos los Hombres: pasados, presentes y futuros como de todas las Humanidades, con su bautismo; con su pasión y muerte; con su propia sangre, dando cumplimiento a la Voluntad del Padre, de Cristo ser el Cordero de Dios, tal como se explica en el Levítico y en la carta de Pablo a los Hebreos;
c) Alejarse del Mundo entendido como la visión y postura Satánica frente a Dios. Esto está en Juan.
d) Cristo es el suficiente salvador y no hay más que Él. Todas las religiones e iglesias para Dios tanto el Padre como el Hijo, no existen y no tienen ningún valor para la salvación. Son todas, totalmente inútiles y perjudiciales para la Salvación. Una pérdida de tiempo. Y punto.
Ésta es nuestra Fe.
Seamos siempre sinceros, auténticos, sin ninguna malicia, porque la Fe lo exige para llegarnos hasta Dios. Caso contrario, si tratamos a Dios burlescamente, entonces, nada conseguiremos por más Católico, Creyente, Religioso que seamos. De Dios no se ríe nadie.
Deseamos a usted la bendición y la iluminación de Dios, el Padre, mediante el Hijo por la acción del Espíritu Santo.